
Como muchos movimientos artísticos innovadores que tienen sus orígenes en el cambio social como ya lo hemos visto en otros; el Muralismo parte también de la inconformidad de una sociedad al inicio del siglo XX. Sin embargo hay un punto medular que provoca el inicio de este movimiento y este es La Revolución Mexicana; movimiento que se inició en 1910 en protesta de la dictadura del General Porfirio Díaz que ejerció el poder en México desde 1876 hasta 1911, donde en la primera década del siglo nuevo estallaron varias crisis en distintas esferas de la vida nacional, que reflejaban el descontento de algunos sectores con sentimientos de inconformidad irreconciliables, jamás vistos en la historia de México; se había creado un abismo entre la clase social alta y el resto de la población que hasta entonces ascendía a 15.2 millones de mexicanos, de los cuales 11 millones de campesinos recibían un salario de 20 a 30 centavos por día viviendo en la pobreza total sin aspiraciones a nada, esto aunado a un analfabetismo descomunal provocando pequeñas revueltas que poco a poco se fueron convirtiendo en verdaderas manifestaciones de lucha por la libertad en contra de un régimen que los asfixiaba y del cual tenían que combatir, aunque la vida quedara en el camino.

A este suceso se le suman otros grandes acontecimientos que refuerzan aún más los ideales del movimiento Muralista que son: La Gran Depresión originada en E.U. y la Primera Guerra mundial; veamos de que se trata esto.
La Gran Depresión de 1929 fue un acontecimiento de tipo financiero, donde básicamente todos en el planeta se quedaron sin dinero, no había liquidez, este tremendo acontecimiento ocurrió en Nueva York un jueves, al cual se le nombró “el gran día negro” prolongándose toda una década; fue de tal magnitud que todo el mundo quedo afectado y por supuesto México no fue la excepción. Ha sido el mayor apocalipsis financiero de todos los tiempos dando paso a la segunda guerra mundial.
Para el año de 1939 inicia La Segunda guerra Mundial; y bueno haciendo hincapié para que no se nos olvide; fue uno de los momentos más espantosos y vergonzosos que la humanidad haya sufrido. La contabilización de las víctimas en esa guerra ha sido objeto de numerosos estudios, se estima en un aproximado optimista entre 40 y 45 millones de muertos, pero otros cálculos más pesimistas elevan las cifras hasta 100 millones.

Bien una vez visto esto enfoquémonos en el Muralismo.
MURALISMO
En 1921 un grupo de intelectuales y artistas mexicanos se vieron en la necesidad de crear una nueva identidad nacional, buscaban consolidar los ideales sociales creados en la Revolución Mexicana, los cuales eran Libertad, Igualdad y Justicia, pero ante todo la intención era la de destacar un nacionalismo fuerte en su arte, cambiando las ideas preexistentes raciales contra los indígenas, ideas que se habían creado durante el colonialismo.
El presidente Álvaro Obregón elegido para el periodo 1920-1924 nombró a José Vasconcelos como secretario de educación pública, éste desarrolla el primer programa de educación y cultura en México después de la Revolución.
Con el propósito de crear un sentimiento de unidad nacional y promover los valores de un estado moderno y nuevo, Vasconcelos impulsa la educación pública nacional concentrándose en la lengua castellana como punto de unificación en un México pluricultural y multilingüístico; también desarrolla un programa de arte público, para construir y reforzar la identidad y la memoria colectiva. De este modo Vasconcelos asegura la integración de la población indígena, tradicionalmente discriminada por los sectores dominantes.

Y así nace el Muralismo con mucho apoyo del estado y una incipiente aceptación de la población.
El Muralismo era un arte concebido por el estado como una estrategia social para la integración de las distintas sociedades e identidad nacional, éste tenía que tener un alcance masivo, y solo un arte público lo podría hacer.
En 1922 surge un grupo llamado Sindicato Revolucionario de Obreros Técnicos y Plásticos, Pintores, Escultores y afines, este peculiar grupo manejaba unos marcados ideales socialistas. El grupo estuvo integrado por David Alfaro Siqueiros (secretario general), Diego Rivera (secretario del interior), Fernando Leal (secretario del exterior), Xavier Guerrero (secretario de finanzas), José Clemente Orozco, Fermín Revueltas, Germán Cueto, Carlos Mérida, Jean Charlot, Roberto Montenegro, Ramón Alva Guadarrama, Amado de la Cueva, Roberto Reyes Pérez, Ignacio Asúnsolo, Emilio Amero, Emilio García Cahero, Manuel Anaya, Ramón Alva de la Canal, Máximo Pacheco, Nahui Ollín y Carmen Foncerrada. La mayoría eran pintores, y solo dos escultores; Asúnsolo y Cueto, compartiendo un mismo espacio laboral. Algunos al frente de las obras y otros como ayudantes. Trepados en andamios; experimentaban trazos y coloridos bocetos sobre los muros, también investigaban sobre la encáustica, el fresco y otras técnicas.

El muralismo se distinguió por tener un fin educativo que pretendía difundir parte de la cultura y vida mexicana a un público masivo, por lo que la mayoría de sus obras se ubican en muros de edificios públicos.
Por supuesto como en todos los movimientos artísticos importantes, la creación de un manifiesto era indispensable para el grupo, el cual daría dirección y sustento a su organización, siendo publicado en 1923. Posteriormente en 1924 se crea un periódico de nombre El Machete; éstos dos elementos eran la pieza fundamental de existencia del grupo muralista, debutando como un proyecto colectivo.
El Machete es un periódico mexicano de izquierda que se empezó a publicar en marzo de 1924 como órgano del Sindicato de Obreros Técnicos, Pintores, Escultores y Grabadores Revolucionarios de México, entre cuyos miembros se encontraban Xavier Guerrero, Fermín Revueltas, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros. En 1925 pasa a ser órgano del Partido Comunista Mexicano.
En la actualidad, se pueden hallar distribuidores en el metro de la Ciudad de México, así como en las calles y algunas plazas, tales como el Tianguis Cultural del Chopo. La versión electrónica se halla disponible también.
En sus inicios los muralistas colaboraron en la realización de las obras entablando estrechos diálogos y creando vínculos fraternos. Los pintores se aglutinaron alrededor de propuestas estéticas, que además del entorno laboral, también compartieron espacios cotidianos y posturas políticas. Varios de ellos militaron en el Partido Comunista Mexicano (PCM).
El PCM fue un partido de la izquierda mexicana. A lo largo de su historia sufrió escisiones, reunificaciones, pasos por la clandestinidad, guerra sucia en su contra y diversos cambios doctrinarios. El PCM fomentó la formación de varios de los más trascendentes sindicatos mexicanos de la industria, así como de múltiples organismos independientes de campesinos y sectores populares a lo largo de su historia. Es considerado como el partido fundacional de la izquierda mexicana, a pesar de sus años de clandestinidad, fue el grupo político opositor de mayor continuidad con un total de 62 años de trayectoria.
La pintura mural fue el punto de convergencia de personalidades distintas, pero muy comprometidas con su proyecto pictórico, que los encaminó a retos técnicos y controversias de sus críticos reticentes, porque al realizar un arte público, los artistas se involucraban en ámbitos al límite de susceptibilidades de índole político, que generaron ideas para organizarse en un sindicato.
Quizás los muralistas más conocidos sean Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco.
Diego Rivera. Estuvo en Europa formándose como un pintor de caballete que se codeaba con pintores como Cesan, Modigliani y Picasso, así que verlo como muralista era algo nuevo. Regresa a México desde Italia en 1922 integrándose casi de inmediato al grupo incipiente del Muralismo.

David Alfaro Siqueiros. A los 16 años de edad se enlista en el ejército constitucionalista para luchar en la Revolución Mexicana, experiencia que lo involucra a conocer profundamente a las masas trabajadoras; obreros, campesinos, artesanos e indígenas, así como a las tradiciones de la pluricultural de México. Tres años después en 1919 se va a Europa, sumando otra experiencia que determina su visión artística.

José Clemente Orozco. Con evidentes capacidades artísticas trabajó como caricaturista en publicaciones como; El Hijo del Ahuizote y La Vanguardia. Obligado por su familia a estudiar Ingeniería en Agronomía, pronto sintió la insatisfacción que le producía aquello, así que en 1909 decide por fin dedicarse a lo que le apasionaba por lo que para 1922 se une a Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y otros artistas en un nuevo proyecto llamado Muralismo.

El Muralismo se caracteriza por dos técnicas el Fresco y la Encáustica.
El fresco es una técnica pictórica que consiste en pintar sobre una capa húmeda de cal con pigmentos minerales disueltos en agua. El proceso de secado de la cal hace que los pigmentos se aglutinen y se fijen, aumentando su durabilidad. Esta técnica requiere de velocidad en la ejecución, pues compite contra el tiempo de secado, razón por la que no admite repintes. Así, quienes utilizan esta técnica son auténticos maestros del arte.
En la técnica de la encáustica, el material aglutinante es cera caliente mezclada con pigmentos. Se puede aplicar con un pincel o una espátula igualmente caliente. Luego de aplicarse, se pule con trapos de lino bien secos. Se ha utilizado desde tiempos antiguos, especialmente sobre tabla, aunque también en la pintura mural.
A excepción del surrealismo, las vanguardias proponían alcanzar la total autonomía artística disolviendo la importancia del contenido; contrariamente el muralismo mexicano se enfocaba hacia el contenido, pero en un contexto renovado, con nuevas mitologías, relatos y propósitos, gracias a lo cual superaba la mirada eurocéntrica y se constituía como un movimiento realmente latinoamericano.
El proceso de conceptualización de estos contenidos generó formas plásticas únicas, gracias a la observación de la estética prehispánica e indígena.

Fermín Revuelta. Pintó el primer mural en la Escuela Nacional Preparatoria, el gran mural en el edificio El Banco Nacional Hipotecario Urbano y de Obras Públicas. Y decoró con murales la residencia de el General Lázaro Cárdenas
El arte del muralismo de este modo, rechaza la absolutización de la autonomía del arte y devuelve a este su función social amplia, esencialmente educativa y propagandística.
En un principio los muralistas se dejaban influenciar por las vanguardias pictóricas de su tiempo como el Expresionismo, especialmente en Orozco, el Futurismo en Siqueiros, y el Cubismo sintético en Diego Rivera; pero no como una forma de imitación sino como una forma de experimentación sin embargo poco a poco acabaron por abandonar tales influencias.
La importancia del contenido social con el que nació el Muralismo marcó el concepto con el que iniciaría la selección de temas los cuales estuvieron al servicio del estado.
En aquellos tiempos las ideologías de izquierda estaban en plena expansión y se proponían como una promesa, así también se exponían valores y principios rectores del socialismo; la lucha de clases, la libertad, la vida de los campesinos, las clases obreras y sus líderes políticos eran los temas a representar.
La idea del Muralismo también era mostrar la modernización y el progreso, por lo tanto hicieron alarde de la ciencia y la tecnología, incluyendo la industrialización y la máquina como un culto al progreso con una clara lógica Marxista.
Los Muralistas se enfocaron en temas de historia y mitología de las culturas prehispánicas; de este modo dieron voz a los herederos del pasado indígena a través del arte; se incluían mitos, símbolos, costumbres, pasajes históricos, etc. El tema indígena no se representó desde un principio si no progresivamente.

ROBERTO MONTENEGRO. Fue el creador del primer mural del país con el Árbol de la vida pintado en ex-templo de San Pedo y San Pablo, otras obras de el se encuentran en el edificio de la Secretaria de Educación Pública (SEP). Muralista, pintor de caballete, escenógrafo de ópera, ballet y teatro considerado uno de los mejores artistas de México.
Diferentes momentos de la historia mexicana formarían parte del repertorio del Muralismo; la conquista, la abolición de la esclavitud, la guerra de independencia, la revolución mexicana y las campañas de alfabetización, también algunas representaciones de triunfos de la nación y desafíos por enfrentar.
En el momento en que el Muralismo encuentra su conexión con la autenticidad nacional, se desarrolla la iconografía indígena lo que le da al movimiento identidad, sentido y riqueza.
David Alfaro Siqueiros mostraba un trabajo más futurista, en sus inicios practicó un estilo cuya dinámica representaba la lucha de clases, sin embargo poco a poco fue evolucionando hacía un trabajo más dinámico, buscaba un equilibrio estético universal con toques modernos hasta conseguir un espacio escénico poli dimensional, sus obras están cargadas de formas geométricas, diagonales, líneas rectas y formas curvas, con influencia del arte mexica y elementos olmecas en las fisonomías de los personajes, pómulos pronunciados, ojos oblicuos, nariz y labios anchos.

Diego Rivera quien había estudiado en Europa practicaba el Cubismo Sintético, heredando de esta vanguardia el equilibrio, el orden y la armonía, así como los principios de la construcción plástica, lo cual podemos observar en sus obra mural.

Rivera aplicaba elementos del arte bizantino italiano, cuando poco a poco optó por las causas de identidad mexicana, estudió y exploro las fuentes del arte prehispánico tales como códices y piezas del arte mexica.
Al igual que los pintores renacentistas que estudiaron la miología griega e historias bíblicas para construir su arte, Diego Rivera se convirtió en el inventor de lo clásico indígena.
Con una mirada idealizante, Rivera promueve la representación del mundo indígena, que resultaba incluyente de lo femenino dándole voz y presencia.
José Clemente Orozco con su marcada influencia expresionista, trabajó intensamente los valores socialistas, junto con la educación, el progreso y la industrialización. Pero se centró en el universo masculino de personajes, que lo distingue de Diego Rivera.
Orozco rechaza las composiciones idealizadas y mitológicas del pasado indígena, pues entiende que lo prehispánico y lo hispánico se mezclan en un proceso violento marcado por la lucha entre el progreso y los sectores reaccionarios.
De este modo, Orozco fue el primero en aludir al colonialismo español, tal como lo pone en evidencia el fresco Cortés y la Malinche, de 1926, en el que se evidencian las consecuencias de la dominación hispana y la subyugación indígena.

ALGUNOS DE LOS MURALES DE LA CIUDAD DE MÉXICO.
Una de las obras más grandes de Diego Rivera fue pintada entre 1929 y 1935; cuenta con una superficie de 276 metros cuadrados que rodea la escalera del Palacio Nacional. Se divide en tres secciones; el plano de la derecha representa la época prehispánica, el plano central se representa el periodo de la conquista española y finalmente el plano de la izquierda representa la formulación de los ideales marxistas a comienzos del siglo XX.

Ocho mil metros cuadrados hacen de este mural uno de los más grandes de la historia.
Uno no de los más importantes del artista David Alfaro Siqueiros representa una metáfora del deseo y la lucha de hombres y mujeres por una sociedad mejor.
En un octágono irregular, se plasma el mural cubriendo todas las caras y se apoya en una base giratoria para poder apreciar el mural acompañado de un espectáculo de luces y sonido, narrado en una grabación del propio artista.
Lugar: Polyforum Siqueiros (Insurgentes Sur 701, Benito Juárez, Nápoles, 03810 Ciudad de México, CDMX). A 6 km de Hotel Casa Blanca.

«Khatarsis» Es un mural que adorna una de las paredes del Museo del Palacio de Bellas Artes. A partir de una interpretación crítica, el historiador Justino Fernández fue quien dio nombre a esta obra, pues argumentó que el fuego de la parte superior simboliza la catarsis, “Una posibilidad de salvación por medio de la renovación, de la destrucción”.
Alude a la historia de México presentando una alegoría sobre la guerra y la desintegración, con imágenes de lucha, caos, prostitución y la denuncia de los peligros del desarrollo tecnológico.
Una obra con mucho dramatismo y fuerza en la escena con colores brillantes, composición caótica y trazos gruesos.
Lugar: Palacio de Bellas Artes (Av. Juárez, Centro Histórico, 06050 Ciudad de México, CDMX). Ubicado a 2 km de Hotel Casa Blanca

Un bello mural de Orozco se encuentra en la escalera de la “Casa de los azulejos” ubicada en la calle Madero. Es el único mural en el que escribió sobre la pared el título: Omni-/ciencia (todo el saber). Múltiples análisis se han hecho de la obra de este artista metafórico, filosófico, complejo y profundo, A través del significado de “Omniscciencia”: la facultad de Dios de saberlo todo, se ha establecido que Orozco quiso expresar en el mural el misterio del origen de la vida, misterio que solo le es dado a conocer a Dios.
Lugar: Casa de los Azulejos (Av Francisco I. Madero 4, Centro, 06500 Ciudad de México, CDMX). A sólo 1.5 km de Hotel Casa Blanca.

Otro de los murales más famosos del Palacio de Bellas Artes es una obra en tres partes, la central en donde aparece un obrero que opera una máquina controlando el universo y a su vez, divide del lado izquierdo una sociedad capitalista que alude a la ciencia con la representación de Charles Darwin y la parte de derecha donde se observan personajes como Lenin, Karl Marx, León Trotsky y Friederich Engels que representan a un mundo socialista.
Además pueden observarse imágenes de guerra y lucha de clases, imágenes características de Diego Rivera.
Lugar: Palacio de Bellas Artes (Av. Juárez, Centro Histórico, 06050 Ciudad de México, CDMX). Ubicado a 2 km de Hotel Casa Blanca.

PUBLICACIÓN No. 36
ESCRITO POR GUIMELEN

- ESCRITORAS, FILÓSOFAS Y CIENTÍFICAS DE LA ANTIGÜEDAD
- ARQUITECTURA MEDIEVAL Y SU VÍNCULO MUSICAL
- SÍMBOLOS Y SIGNOS (Historia e interpretación)
- ARQUITECTURA DE LA ANTIGÜEDAD Y SU VÍNCULO MUSICAL
- MURALISMO DE MEXICO PARA EL MUNDO
- MARTE: CRÓNICAS INTERPLANETARIAS III
- M. C. Escher y sus mundos extraños
- VENUS: CRÓNICAS INTERPLANETARIAS II
- MALINTZIN ENTRE DOS MUNDOS
- CRÓNICAS INTERPLANETARIAS: Hipótesis Nebular y Mercurio
- SÍNDROMES, COMPLEJOS Y MITOLOGÍA
- ESPADAS MEDIEVALES LEGENDARIAS
- MUJERES ESPÍAS
- LOS CAPRICHOS DEL DIABLO
- EN EL DIVÁN DE SIGMUND FREUD
- ARQUITECTURA DE LA POSMODERNIDAD
- DADAÍSMO EL ARTE QUE NO ES ARTE
- LA ARQUITECTURA DEL MOVIMIENTO MODERNO
- Stanley Kubrick y su odisea del espacio cinematográfico.
- EL ARRIBO DE LA REINA DE SABA
- GUERREROS JAGUAR Y AGUILA
- REINAS DE EGIPTO
- Manzanas que hicieron historia
- POLVO DE ESTRELLAS (Biografía de Carl Sagan)
- LEONARDO EL POLÍMATA
- Y como dijo Pancho Villa: ¡Viva México cab…!
- La Bruja incomprendida. Segunda parte.
- Obertura a Guillermo Tell
- LA BRUJA INCOMPRENDIDA 1° PARTE
- LLÉVAME VOLANDO HASTA LA LUNA
- ARTE CONCEPTUAL
- INCIENSO Y MENTA (Todo sobre hippies)
- YO SOY LA MORZA 2° PARTE
- COLIBRÍ ZURDO Y LA GRAN TENOCHTITLAN
- BAUHAUS CASA DE CONSTRUCCIÓN
- Al-Ándalus, un oasis para el mirlo negro
- YO SOY LA MORZA
- La cabalgata de las valkirias
- El diablo anda suelto
- Las tribus urbanas y su vínculo con el género musical.